http://inngenious.blogspot.com.es/search/label/CIENCIA

03 marzo 2016

EL ÉBOLA, LA HISTORIA DE UNA ENFERMEDAD DURANTE AÑOS CASI OLVIDADA POR LA CIENCIA

El Ébola es un enfermedad grave producida por un virus (EVE) de la familia Filoviridae (filovirus) que puede llegar a a ser mortal en el ser humano principalmente cuando no existen los adecuados cuidados de salud. 

El virus del Ébola se transmite por contacto directo con la sangre o los fluidos corporales de una persona infectada y con síntomas de la enfermedad, de personas muertas infectadas y por la exposición a objetos que han sido contaminados con secreciones infectadas (objetos plásticos, ropa, etc…) así como a partir de animales infectados (chimpancés, gorilas, murciélagos frugívoros, monos, antílopes y puercoespines infectados) encontrado muertos o enfermos en la selva. Se considera que los huéspedes naturales del virus son los murciélagos frugívoros de la familia Pteropodidae. 


PREVENCIÓN

Las personas asintomáticas no transmiten la infección. La posibilidad de transmisión está relacionada con la aparición de síntomas y el riesgo aumenta a medida que progresa la enfermedad. No se transmite por vía aérea, únicamente por contacto con fluidos corporales, incluido el semen y la leche materna. Posteriormente, el virus se propaga entre la población por contacto directo (a través de las membranas mucosas o de soluciones de continuidad de la piel) con órganos, sangre, secreciones, u otros líquidos corporales de personas infectadas, o por contacto indirecto con materiales contaminados por dichos líquidos. 

La infección del personal sanitario al tratar a pacientes con EVE ha sido frecuente cuando ha existido contacto estrecho y no se han observado estrictamente las precauciones para el control de la infección. La probabilidad de ser infectados por Ébola en el personal sanitario se estimada entre 21 y 32 veces mayor que la población general de adultos. A lo largo de la epidemia 900 trabajadores sanitarios fueron diagnosticados de EVE, de los cuales 519 fallecieron.

El virus del Ébola se inactiva por calor a 60ºC en periodos de 30 a 60 minutos, por ebullición durante 5 minutos y por radiación gamma combinada con 1% de glutaraldehído o por radiación ultravioleta. El virus es sensible al hipoclorito sódico y otros desinfectantes. También es sensible a la deshidratación y a la luz solar pero puede sobrevivir algunos días en sangre y en cadáveres infectados. En fluidos está descrita una supervivencia de varios días a temperatura ambiente. En algunos estudios experimentales, se ha observado que puede sobrevivir también desde unas horas a varios días en materiales líquidos o secos (ropa, superficies y objetos de plástico o cristal, no en acero), especialmente a bajas temperaturas y en ausencia de luz. La refrigeración o congelación no inactiva estos virus, de hecho la capacidad infectiva se mantiene a 4ºC durante varios días, e indefinidamente a temperatura de -70ºC. 


SITUACIÓN ACTUAL

El virus se detectó por vez primera en 1976 en dos brotes simultáneos ocurridos en Nzara (hoy Sudán del Sur) y en una aldea situada cerca del río Ebola, que da nombre al virus, en Yambuku (República Democrática del Congo). El último brote de Ébola en África Occidental ha sido el de mayor magnitud y complejidad desde que se descubrió el virus en 1976, con un número acumulado de casos a nivel mundial de 28.637 (15.215 confirmados) incluyendo 11.315 fallecidos.



El 22 de marzo de 2014 el Ministerio de Sanidad de Guinea notificó a la OMS el brote que se extendió a los países vecinos, Liberia y Sierra Leona, donde los primeros casos se notificaron a finales de marzo. Pero no fue hasta el 8 de agosto del 2014 cuando la epidemia de EVE en África Occidental fue declarada Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional por la Directora General de la OMS, cuando los primeros contagiados de Ébola llegaban a EEUU y Europa. Aunque aquí el tema quedó en un susto, ha habido más casos y más muertes desde entonces que en el total del resto de brotes aparecidos desde la aparición de la enfermedad y se ha extendido a diferentes países. Los más afectados, Guinea, Liberia y Sierra Leona, carecen de recursos humanos e infraestructurales y han salido recientemente de largos periodos de conflicto e inestabilidad, apareciendo además brotes en Nigeria, Senegal, EEUU, España, Mali, Reino Unido, Italia, etc. como casos importados de transmisión localizada.

El 14 de enero de 2016 recibíamos la gran noticia de que la OMS declaraba a Liberia país libre de transmisión del virus Ebola, poniendo así fin al brote de Enfermedad por Virus Ebola (EVE) en África Occidental que comenzaba a notificarse en marzo de 2014. Los 3 países en los que hubo transmisión extendida e intensa del virus debían no obstante mantener durante tres meses una vigilancia intensificada con el objetivo de detectar y responder de manera precoz ante cualquier posible re-emergencia de EVE. Al día siguiente de la publicación de esta noticia, en Sierra Leona se notificaba un nuevo caso confirmado de enfermedad por virus del Ébola, por lo que vuelve a ser incluido en la categoría de país con transmisión limitada de Ébola. 

La participación de la comunidad ha sido fundamental para el éxito del control de los brotes de Ébola. Aunque otras estaban siendo testadas, en febrero de 2015 la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobaba la primera prueba de diagnóstico rápido para el Ébola. Producida por Corgenix, una empresa en Broomfield, Colorado, utilizaba anticuerpos para identificar una proteína específica del virus Ébola. Como alternativa a las anteriores basadas en PCR, la prueba solo necesitaba unas pocas gotas de sangre de un pinchazo en el dedo para ser realizada y los resultados podían obtenerse en 15 minutos. Este kit ha sido de gran ayuda para el control de la enfermedad por los profesionales de la salud que trabajaban en zonas remotas.

La evolución de la enfermedad del Ébola a partir de ahora depende de la aplicación de diferentes intervenciones, como la atención a los enfermos, la vigilancia y el rastreo de los casos, los entierros en condiciones de seguridad y la investigación de nuevos tratamientos y vacunas que eviten la mortalidad de la enfermedad. 


TRATAMIENTO E INVESTIGACIÓN

El tratamiento actual del Ébola es básicamente sintomático con la rehidratación del individuo para el mantenimiento del equilibrio del balance de fluidos y electrolitos, volumen circulatorio y presión arterial. Existen algunas alternativas sin eficacia clínica totalmente demostrada en humanos que han obtenido resultados positivos en modelos de infección con animales de experimentación: plasma de convaleciente, anticuerpos monoclonales específicos (ZMApp), antivirales (Favipiravir, Bricidofovir). 


En septiembre del 2014 científicos que trabajaban en el Ébola y representantes de empresas y organismos se reunieron en la sede de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Ginebra, Suiza, para discutir la forma de acelerar el desarrollo clínico de vacunas, un proceso que normalmente lleva años. Todavía no existe ningún tratamiento farmacológico aprobado que neutralice el virus del Ébola de forma demostrada, pero están en fase de desarrollo diversas formas de hemoterapia, inmunoterapia y farmacoterapia. Tampoco existen todavía vacunas aprobadas contra esta enfermedad, que causó más de 11.000 muertes en el brote de 2014-2015 en el Africa occidental, pero dos posibles vacunas candidatas están siendo evaluadas.

Científicos que trabajan en Ébola se reunieron en Boston el pasado 23 de febrero, donde investigadores del National Institute of Allergy and Infectious Diseases (NIAID) in Bethesda, Maryland presentaron los resultados de un único anticuerpo monoclonal, una proteína que ataca a los virus, aislado de un superviviente de la enfermedad humana del virus Ébola que protegió a primates no humanos al aplicarlo incluso hasta cinco días después de la infección. Este anticuerpo puede ser utilizado para avanzar ahora hacia pruebas en seres humanos como una posible vacuna para el Ébola. Según los autores de la investigación, se trata del primer anticuerpo que demuestra la capacidad de neutralizar el virus por esta interacción entre el virus y su receptor celular. En conjunto, la evidencia identifica un nuevo sitio de vulnerabilidad en el virus y sugiere que mAb114 podría ser una terapia eficaz que justifica una mayor investigación.

El esfuerzo gigantesco para probar nuevos medicamentos y vacunas en Guinea, Sierra Leona y Liberia había producido por el momento una vacuna de Merck como el único producto que había dado resultados inequívocamente positivos. En Enero del presente año, Gavi, la Alianza para el acceso a inmunización de personas en regiones desfavorecidas y la multinacional Merck Sharp & Dohme Corp., una subsidiaria de Merck & Co., Inc. (conocido como MSD fuera de los EE.UU. y Canadá) firmaron un acuerdo para apoyar la provisión de esta vacuna para proteger contra futuros brotes mortales de Ébola. Bajo el compromiso de compra anticipada, Gavi ha proporcionado a Merck 5 millones de dólares para el desarrollo de la vacuna viva atenuada rVSVΔG-ZEBOV GP con el compromiso de que será presentada para obtener la licencia a finales de 2017. Si se aprueba, se convertiría en la primera licencia del mundo de vacuna contra el Ébola y Gavi sería capaz de empezar a comprar la vacuna para crear una reserva para futuros brotes. Además, Merck aseguró que 300.000 dosis de la vacuna estarían disponibles a partir de mayo 2016 para su uso en ensayos clínicos de mayor amplitud y/o en caso de emergencia, según fuera necesario. Según publicó en enero el diario El País, el anuncio de la colaboración entre Gavi y Merck ha sido bien acogido por Médicos Sin Fronteras (MSF). Pero la ONG va a seguir alerta en relación con el precio final de la vacuna, que determinará si esta puede usarse de forma generalizada en los países en vías de desarrollo.

En el reciente encuentro en Boston los científicos también presentaron los resultados del ensayo clínico de lo que una vez fue considerada como el más prometedor de tratamiento de Ébola: el cóctel de anticuerpos llamados ZMApp. Para la realización del estudio, que comenzó a finales de la epidemia, se inscribió mucha menos gente que habían planificado los investigadores por lo que no pudo proporcionar resultados estadísticamente significativos. No obstante, Mapp biofarmacéutica, de San Diego, California, la empresa que fabrica ZMApp, emitió un comunicado de prensa al día siguiente donde su CEO, Kevin Whaley, indicaba que la compañía ahora "perseguirá vigorosamente el desarrollo y la solicitud de licencia de ZMApp como tratamiento para el ébola".

Al menos, existen avances en lo que a resultados de investigaciones se refiere contra esta enfermedad que durante años permaneció olvidada por afectar únicamente a países con pocos recursos económicos.


Fuentes consultadas:  




No hay comentarios:

Publicar un comentario