Son muchas las empresas que en estos años de ajustes y recortes han dejado de autofinanciar sus proyectos y buscado nuevas vías para soportar los gastos de su departamento de I+D+i. Pero las convocatorias de los Ministerios no han llegado tan golosas como antaño y no siempre en los plazos previstos.
Algunas, como la esperada RETOS DE COLABORACIÓN DE MINECO, fue publicada acabando el 2013 y las empresas apenas tuvieron tiempo de reincorporar sus plantillas de las vacaciones navideñas para preparar un buen proyecto. Otras, como EMPLEA 2014 se publicaba con unos requisitos asociados de condicionar la concesión de la ayuda a un Máster en gestión de la I+D+i difícilmente asumible por algunos. Además, no son pocas las empresas a las que CDTI ha premiado su esfuerzo en poner en marcha algún proyecto de I+D+i con una evaluación positiva y la ayuda se ha quedado sin ejecutar por las difícilmente asumibles condiciones financieras impuestas por la entidad.
Algunas, como la esperada RETOS DE COLABORACIÓN DE MINECO, fue publicada acabando el 2013 y las empresas apenas tuvieron tiempo de reincorporar sus plantillas de las vacaciones navideñas para preparar un buen proyecto. Otras, como EMPLEA 2014 se publicaba con unos requisitos asociados de condicionar la concesión de la ayuda a un Máster en gestión de la I+D+i difícilmente asumible por algunos. Además, no son pocas las empresas a las que CDTI ha premiado su esfuerzo en poner en marcha algún proyecto de I+D+i con una evaluación positiva y la ayuda se ha quedado sin ejecutar por las difícilmente asumibles condiciones financieras impuestas por la entidad.
Pero CDTI prometió mejorar las condiciones de sus ayudas en 2014 y lo ha cumplido aprobando un nuevo paquete de medidas que mejora el tramo no reembolsable (equivalente a subvención) principalmente para las PYMEs, el cual puede alcanzar el 25% de la ayuda concedida para los EKAs (proyectos de cooperación tecnológica internacional). Además, ha creado la opción de incrementar el plazo de amortización de los proyectos de Innovación Tecnológica a cinco años, conservándose el año de carencia aunque incrementándose al 2,5% anual el tipo de interés. Todas estas medidas serán sin duda bienvenidas por las empresas pero hace falta seguir apostando por aquellas PYMEs que ya han incorporado la cultura de la innovación en sus estrategia empresarial que siguen sin poder acceder a este tipo de ayudas porque continúan saliendo de la crisis.